Ayer tuve la oportunidad de participar en el acto de presentación del libro Cajas de Ahorros: nueva normativa, editado por la Fundación de las Cajas de Ahorros y que ha coordinado José María Méndez (Director General de la Confederación Española de Cajas de Ahorros). Como ya anuncié en una previa entrada, nuestra contribución se refería al nuevo modelo de gobierno corporativo de las cajas.
En el acto de ayer, tras escuchar las intervenciones de otros participantes, me pareció que estamos ante una reforma de gran alcance para el sector de las cajas pero cuyo desenlace final todavía aparece rodeado de incertidumbre (incluso regulatoria, ante los incesantes cambios normativos). El diseño que de los aspectos referidos a los órganos rectores hizo el Real Decreto-ley 11/2010 (modificando ampliamente la LORCA) se vio severamente afectado por el posterior Real Decreto-ley 3/2011, no tanto porque alterara las normas en materia de gobierno corporativo de las cajas, sino porque al exigir a éstas un capital principal superior, son varias las cajas que se han visto obligadas a integrarse en procesos que pueden conllevar la cesión de la actividad financiera a un banco participado por ellas y que pierdan su estatuto como tales entidades de crédito. Esto dispensa de la aplicación del régimen de gobierno corporativo a aquellas cajas que pasan a ser fundaciones.
Madrid, 10 de junio de 2011