Coincidí con el
Profesor Joaquín Maudos en una Jornada organizada por el Profesor Andrés
Recalde hace un par de años en la Universidad Jaime I de Castellón sobre la
crisis e las cajas de ahorros. Al escuchar su intervención pude comprobar que
era un destacado estudioso de nuestro sistema financiero y he seguido sus
publicaciones, en particular a través del recomendable blog de cigarras y hormigas, que parece
haberse ralentizado en los últimos meses.
Publicaba ayer El País
Negocios una contribución titulada Reestructuración
bancaria y exclusión financiera interesante por lo que apunta en la
relación entre la crisis financiera, la disminución de las redes de sucursales
bancarias y el riesgo de que determinadas poblaciones se vean afectadas por la
exclusión financiera. El punto de partida es un Informe de FUNCAS y el dato
esencial es el cierre en cinco años del 23% de las sucursales existentes y el
consiguiente incremento de municipios sin una sola sucursal.
Las conclusiones
de Maudos:
“En resumen, los
desequilibrios acumulados en la anterior etapa de expansión han obligado al
sector bancario a realizar una profunda reestructuración que conlleva un ajuste
drástico en la capacidad instalada. Aunque la reducción de la red de sucursales
ha empeorado la accesibilidad financiera, es un ajuste necesario para reducir costes
y ganar eficiencia y para adecuar la capacidad instalada a un nuevo escenario
en el que la economía española debe reducir su nivel de endeudamiento. Además,
a pesar del cierre de oficinas llevado a cabo, España sigue siendo el
segundo país de la eurozona con el mayor número de oficinas por habitante.
…
Aunque en España algo más de un millón de personas no
tienen acceso a una oficina bancaria en su lugar de residencia, eso no implica
necesariamente exclusión financiera, ya que hay otras formar de acceder a los
servicios financieros a través de la banca por Internet o la banca telefónica. En consecuencia, además de
luchar contra la exclusión social (como la pobreza, que es uno de los
determinantes fundamentales de la exclusión financiera), es fundamental que la
población tenga acceso a las tecnologías de la información y las comunicaciones
para evitar su exclusión financiera”.
Más allá de la
evolución de las redes bancarias, el escenario que describe Maudos apunta a la
evolución de la contratación bancaria, que en relación con operaciones básicas
(ingresos, transferencias, servicio de caja en general, etc.) es cada vez más y
una contratación entre distantes y a través de medios electrónicos, lo que se
refleja en la regulación aplicable.
Madrid, 24 de febrero
de 2014